Olfateando

Rayos penetrantes de nuestro astro rey incidían directamente sobre mi piel. No he tardado en notar un leve picor en mi cuello. Me he quemado. El trabajo al aire libre es lo que tiene. Siempre tienes buen color.

He llegado a casa y después de ducharme con agua fría he buscado en el armario de las cremas y los "potinges" el aftersun. Lo buscaba con deseo. Era un intento inútil de recordar aquel primer día de playa del verano dónde te mimetizas con el entorno y puedes pasar por el señor cangrejo. Desilusión. Aquella crema blanca no olia igual que siempre. Solo había dos opciones posibles: o el bote estaba caducado (que no era el caso), o que hubieran cambiado su perfume.

Algún desaprensivo innovador decidió cambiar el sello identificativo de aquel remedio milagroso contra las quemaduras solares. Ese olor que siempre he relacionado con el verano, con la playa, con el mar. No sé porque lo han cambiado. Espero que no decidan cambiar otros olores como el de la gasolina, el olor a garaje, el de los rotuladores indelebles o el del pegamento "Imedio" (también conocido por el sabor de un melón bien maduro).

Son olores que no me dejan indiferente. No me gustan, pero tampoco me repugnan. A veces hasta tiene cierto encanto ese olor a gasolina entre dulce e irritante.

Una vez pasé por Murcia capital. Aquella ciudad tenía un olor completamente desagradable. Era una mezcla de cítricos pasados y flores del campo húmedas. Me produjo la misma sensación que oler una bayeta mojada. Otro día ya os contaré por qué fui hasta allí.

3 comentarios

Reptil Gusano dijo...

Amigo pequeño Buda. Te recomiendo una pelicula referente a los olores. Como podras imaginarte me refiero a "El perfume" (tambien el libro).
El artista consigue con imagenes transmitir sensaciones olfativas, algo a primera vista dificil.

Viva el vino

Renatilla dijo...

Yo te recomiendo el libro y no hagas caso de un tipo que no lee más que el Larousse del ajedrez y la Biblia a un ritmo de 4 páginas por mes. Un vez leído el libro puedes ver la peli, pero no al revés.
Aprovecho para recomendarte de nuevo Los Pilares De La Tierra, yo me lo estoy leyendo por segunda vez, si quieres luego te lo dejo.

El pequeño Buda dijo...

Leí el perfume. Me gusto. Ví la pelicula. Me sentí engañado.